Según datos publicados este martes 19 de mayo por el Banco de España, la deuda pública española creció un 2,3% en términos interanuales al sumar en un año 27.567 millones de euros respecto a los 1,196 billones registrados en marzo de 2019.
Sin embargo, la lenta reducción de la deuda se fue al traste para atender los expendios que la administración pública se vio obligada a acometer a causa de la crisis del COVID-19.
España comenzó ya en marzo a incrementar sus emisiones de deuda para conseguir financiación ante la crisis, obteniendo la mayor parte de su financiación mediante valores a largo plazo (993.280 millones de euros).
Los datos publicados por el Banco de España reflejan que la deuda de la Administración General del Estado marcó máximos históricos, junto con la de la Seguridad Social, mientras que el endeudamiento disminuye en las comunidades autónomas y corporaciones locales.
Según las estimaciones del Banco de España, la deuda pública seguirá creciendo en los próximos meses hasta situarse entre el 115% o incluso por encima del 120% del PIB en función de lo que duren las restricciones a la movilidad para contener la pandemia de COVID-19.