Los miembros de la tripulación que habían dado negativo por SARS-CoV-2 comenzaron a desembarcar el 27 de febrero y deberán permanecer dos semanas en cuarentena en una instalación gubernamental cerca de Tokio. Luego, si vuelven a dar negativo en las pruebas, podrán abandonar Japón y volver a sus países de origen.
El ministro de Salud japonés, Katsunobu Kato, dijo que la nave será desinfectada y se someterá a mantenimiento en un astillero.
El crucero Diamond Princess con más de 3.700 personas a bordo partió de Yokohama el 20 de enero y, tras varias escalas, regresó el 3 de febrero al puerto de origen donde fue puesto en una cuarentena después de que se desvelara que un pasajero que se bajó en Hong Kong tenía el coronavirus.
A finales de 2019, China informó de un brote de neumonía causada por una nueva cepa de coronavirus en la ciudad china de Wuhan, capital de la provincia de Hubei.
El virus fue denominado SARS-CoV-2, y la enfermedad que provoca, COVID-19.
A nivel global, el virus ya infectó a unas 87.000 personas en más de 60 países y provocó más de 2.970 muertes, la mayoría en la China continental.
El 28 de febrero la Organización Mundial de la Salud elevó a muy alto el riesgo de propagación e impacto del coronavirus a nivel global.