"Durante la conversación, fueron debatidos los últimos acontecimientos en la región (...) El custodio de las Dos Mezquitas Sagradas confirmó el entusiasmo del reino por la seguridad y la estabilidad de Irak y la importancia de mantener la calma y distender la crisis en la región, así como tomar todas las medidas para reducir la tensión", comunicó la oficial agencia de noticias saudí SPA.
Además, el rey saudí conversó por teléfono con el primer ministro en funciones de Irak, Adel Abdul Mahdi, sobre "la difícil situación" en ese país árabe y la región, indica la agencia.
La tensión en Oriente Medio aumentó después de que el comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, general Qasem Soleimani, muriera en un ataque aéreo lanzado por Estados Unidos el 3 de enero cerca del aeropuerto internacional de Bagdad, por orden del presidente Donald Trump.
Junto con el jefe de la Fuerza Quds fallecieron varios altos cargos de la coalición paramilitar iraquí Unidades de Movilización Popular (Al Hashd al Shaabi), incluido el vicejefe la coalición, Abu Mahdi al Muhandis.
Washington considera que Soleimani está implicado en los ataques contra las bases de la coalición en Irak y contra la embajada estadounidense en Bagdad.
Irán expresó una enérgica protesta por las acciones de EEUU y prometió dar "una respuesta contundente" al ataque contra el general Soleimani, que calificó de acto de terrorismo internacional.