Merkel declaró que Berlín rechaza las sanciones extraterritoriales de EEUU y planea discutir las restricciones dirigidas a paralizar la implementación del proyecto gasístico ruso.
"¡Es una clara declaración de guerra! Merkel no quiere que EEUU continúe torpedeando el gasoducto que apoya", escribe el autor del artículo.
El Senado estadounidense aprobó el 17 de diciembre un proyecto de ley que prevé imponer sanciones a las empresas involucradas en la implementación del Nord Stream 2. Ahora, la pieza legislativa debe ser firmada por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien previamente había declarado que lo haría.
"Trump debe mostrar que sigue siendo el presidente y que solucionará los problemas existentes. Por eso hace el papel del policía malo. Otro comportamiento suyo sería tratado en EEUU como un indicio de su debilidad", aseveró Yarulin a Sputnik.
A su vez, la canciller alemana no puede abandonar la política sin proteger el Nord Stream 2, que es un logro suyo en gran parte. Los políticos europeos, incluida Merkel, entienden perfectamente que hoy en día está formándose un bloque anglosajón y, para poder resistirlo, Europa debe estar más unida que nunca.
En estas circunstancias, Merkel se comporta como alguien que busca "mantener la unidad de Europa", porque solo así el bloque europeo "estará listo para resistir a los desafíos económicos", concluyó Yarulin.
El Nord Stream 2, impulsado por una alianza de compañías de Rusia, Alemania, Austria, Francia y Países Bajos, prevé el tendido de dos hilos por el fondo del mar Báltico para transportar un total de 55.000 millones de metros cúbicos de combustible. El gasoducto estará listo para ponerse en funcionamiento entre abril y junio del 2020.