En los primeros segundos del vídeo registrado desde el interior de la jaula, solo se ven a unos peces nadando, pero luego surge un enorme escualo que persigue un cebo flotante. Sin darse cuenta, el tiburón choca de cabeza contra la celda, y su mandíbula se mete en la jaula.
Andrés Fez, quien compartió en las redes el vídeo registrado por su padre, consideró el encuentro cara a cara con el tiburón "una dosis de adrenalina" y agregó que todo terminó bien para ambas partes.
El vídeo fue registrado el último 30 de octubre en las Islas Neptuno, en Australia, un popular destino turístico entre los que desean avistar tiburones blancos en su hábitat natural.