"Se han destinado 16 millones de dólares para dar créditos fáciles de hasta 10.000 dólares, sin garante, y hasta 20.000 dólares, con garante, a todos los negocios que han tenido alguna afectación", dijo Moreno durante un recorrido que realizó a pequeños locales comerciales, ubicados en el centro norte de Quito, alrededor de la Contraloría General del Estado, y que se vieron afectados por las protestas o fueron atacados el día que grupos de encapuchados prendieron fuego a la entidad.
Durante el recorrido, Moreno estuvo acompañado por la ministra de Gobierno, María Paula Romo; el presidente del Directorio de banco estatal BanEcuador, Jorge Wated, y el secretario Particular de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán.
En su cuenta de la red social twitter, Moreno dijo a los empresarios afectados por el paro que "este gobierno jamás los dejará solos".
Visité a emprendedores afectados por saqueos en las manifestaciones. ¡Estamos aquí! entregando #CréditoSOS para la reactivación de sus negocios. @BanEcuadorBP ha destinado más de USD 16 millones para ustedes. ¡Este Gobierno jamás los dejará solos! #DecididosACrecer pic.twitter.com/Kq7hQu0IYW
— Lenín Moreno (@Lenin) October 17, 2019
Wated, mientras tanto, aseguró que el primer mandatario dio instrucciones de no dejar solos a los afectados por los actos violentos efectuados durante las protestas.
Sobre los actos de vandalismo que se vivieron en todo el país, el presidente Moreno afirmó que a las manifestaciones de organizaciones indígenas se unieron "vándalos de una banda de Latin Kings, a la cual el expresidente [Rafael] Correa (2007-2017) les dio muchas prebendas, entre esas el perdón de los crímenes que habían cometido, y se unieron grupos agresivos de correístas", según citó la Secretaría de Comunicación en un comunicado.
Durante la reunión Ontaneda aseguró que la paralización de actividades provocada por las protestas le costó al país más de 2.000 millones de dólares.
Movimientos indígenas y otros movimientos sociales el 13 de octubre levantaron las protestas que durante 12 días mantuvieron contra la decisión del Ejecutivo de eliminar el subsidio a los combustibles para afrontar la crisis económica y al abultado déficit fiscal que enfrenta el país.
Durante las protestas se dieron hechos vandálicos, violencia y saqueos nunca vistos en el país.
Como parte de los acuerdos alcanzados en una mesa de diálogo entre los protestantes y el Gobierno, el presidente Moreno derogó el 14 de octubre el decreto que eliminaba el subsidio a los combustibles, con lo cual los precios de estos volvieron al nivel previo a las protestas.
En las jornadas de protesta, de acuerdo con datos de la Defensoría del Pueblo, fallecieron ocho personas y 1.340 resultaron heridas.
La Defensoría no pudo determinar si las muertes fueron accidentales o provocadas por la represión de la fuerza policial.