El consorcio militar estadounidense Orbital ATK —que actualmente forma parte de Northrop Grumman— celebró un acuerdo con la compañía rusa Energomash para la compra de cuatro motores de cohete rusos. Sin ellos no podrían llevar su carga a la Estación Espacial Internacional (EEI), observa André Ballin, autor del artículo en el diario alemán Handelsblatt.
Además, el periodista señala que Rusia y Estados Unidos están negociando la compra de armas ligeras rusas del fabricante Techmash, que está bajo sanciones europeas, si bien las compañías estadounidenses pueden cooperar con esta empresa.
En julio de este año se informó que EEUU compra gas natural licuado (GNL) de origen ruso porque le sale más rentable.