"El MRREE reafirma que mantiene una política de tolerancia cero en defensa de los derechos de todo el personal que labora en las dependencias ministeriales en el Perú y el extranjero", informó la cancillería en un comunicado.
Una investigación del programa Panorama reveló el domingo que el embajador de Perú en Israel, Fortunato Quesada, venía sosteniendo un trato insultante y humillante con el personal que se desempeña en la embajada, lo que incluía amenazas de despido.
El embajador se dirigía a los trabajadores con lenguaje soez, lo que fue denunciado por los empleados a su mando.
En la noche del domingo 17, el canciller Néstor Popolizio tomó la decisión de separar al embajador de su cargo y ordenar su inmediato retorno a Perú para enfrentar la investigación correspondiente.