"Al conversar con los habitantes de Siria e Irak descubrí un enorme deseo de tregua y reinicio, la gente está cansada y quiere volver a una vida normal, pero dudo que ese mensaje llegue a los oídos de los dirigentes", dijo.
Refirió que los mandatarios de Siria e Irak dijeron estar satisfechos con la labor de la Cruz Roja, pero, según Maurer, la situación es negativa en realidad, la ayuda no se presta en el volumen necesario.
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Prisioneros en Siria
El presidente del CICR, Peter Maurer, afirmó que la disposición de las partes en conflicto sirio para discutir la situación de los prisioneros dará más oportunidades al Comité Internacional de la Cruz Roja en este ámbito.
"Espero que esta disposición a los debates sobre el tema impulse la labor del CICR en este ámbito", dijo en una rueda de prensa sobre los resultados de su visita a la región.
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, declaró el 16 de marzo que su equipo propuso a los países garantes del armisticio sirio crear en Ginebra una secretaría para supervisar el trabajo sobre el canje de prisioneros.
Además, afirmó que su oficina continuará trabajando activamente con las partes interesadas en ese tema.
Situación en Guta Oriental
Mauer destacó también que el nivel de destrucción en Guta Oriental, en Siria, indica que ha podido producirse una violación del derecho humanitario internacional.
"Se trata de un tema delicado, ya que ustedes no pueden saber por un edificio destruido si tuvo lugar una infracción del derecho humanitario internacional o no, pero el nivel de devastaciones hace muy probable que esas violaciones en muchos casos hayan ocurrido", dijo el funcionario al resumir su viaje por Irak y Siria.
"Siempre he subrayado que estamos preocupados no solo de los bombardeos [en Guta Oriental], que en su mayoría se realizan desde el aire, sino además de los ataques con morteros de barrios residenciales que se encuentran en la otra parte", precisó el funcionario, en referencia a los ataques de los radicales contra Damasco.
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Después, Rusia estableció una tregua diaria de cinco horas desde el 27 de febrero y la creación de un pasillo humanitario para que la población abandone Guta Oriental, una zona que en las últimas semanas ha sufrido un repunte de violencia.
Rusia, negociador efectivo
Los habitantes de Guta Oriental pudieron cerciorase de que los rusos actúan como negociadores que logran despertar confianza en las partes en conflicto, declaró este 19 de marzo el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, Peter Maurer, tras efectuar un viaje a Irak y Siria.
"Los rusos desarrollan enérgicos esfuerzos con el fin de conducir hacia la paz a los grupos en confrontación y crear situaciones que permitan la evacuación de la gente, los vi trabajar in situ y no tengo dudas de que están haciendo un aporte positivo, aprecio su trabajo", señaló.
Entre los habitantes de Duma no se nota confianza hacia los militares sirios, pero "sí se deposita en los rusos" que logran actuar como negociadores entre los militares sirios y los extremistas, reveló el jefe del CICR agregando que no puede decir "que eso funcione en todo el territorio de Siria, pero sí en Guta Oriental".
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Unos 25.000 civiles la abandonaron el 18 de marzo por el corredor humanitario abierto cerca de Hammuriya, también este 19 de marzo lo pudieron hacer ya más de 6.000 personas.
La salida de civiles de Guta Oriental continúa.